Sonrisa tierna

Mírate en el espejo,
y explora tu mirada.

Busca los polvos
mas vivos,
e ilumina tu mirada.

Vuelve a la pantalla,
y regálame una mirada.

Que tus ojos
me dibujen
la sonrisa
mas tierna ... tu mirada.

¡Feliz 2008!

M.

Regalémonos un 2008,
con la sonrisa más tierna.

Amantes

Un amante no necesariamente es aquel o aquella, que estando ligado en matrimonio, ama a un ajeno/a.

No, no hablaré de ése amante, hablaré de aquel que quiere y desea amar.

Hablaré de aquel o aquella que estando ligado o no, necesita amar y ser amado.

Entonces hablaré de ése amante, del que urgentemente necesita amar y sentirse amado.

Amante.

Son momentos inconclusos,

son vacíos por llenar.

Es una búsqueda infatigable,

ése deseo de amar.

Yo diria que son momentos,

momentos de pensar,

que son momentos,

momentos de crear.

Es el encuentro de almas,

que se quieren fusionar,

es un momento de éxtasis,

en donde se pretende amar.

Es la química que llama,

y arrastra sin pensar,

es la sangre que late,

y quiere acariciar.

Amantes.

Calor, lujuria y desesperación.

Amantes que se miran

y se encuentran,

que se fusionan y se abrigan.

Amantes que se calientan,

que se sanan y se liberan,

en la búsqueda insaciable

del amor.

Solo el amante es capaz de disfrutar del tesoro oculto,

es solo el amante quien conoce en verdad, el corazón.

Es el amante quien cuestiona e indaga los secretos,

es el amante quien disfruta de lo inmenso que es el corazón.

M.

El Momento

A nuestra edad

sabemos que la vida es vana,

que la vida viene y se vá.

Y se vá a veces ingrata.

Que la vida es vana,

y a mi edad he aprendido a vivir el momento,

ése preciso momento de amar.

De amar y decirle a quien amo,

¨Te Amo¨, porque hoy sé que estoy,

para mañana morir,

y si mañana muero,

no quiero perder el momento.

Ese momento de vivir,

de sentir,

de palpar,

de construir.

No quiero dejar pasar el momento

de besarte,

de consolarte,

de abrigarte,

porque mañana...

mañana puedo dejar de existir.

Por éso hoy,

quiero amarte,

por eso hoy,

quiero abrigarte,

por eso hoy,

quiero mimarte,

por eso hoy,

quiero visitarte,

y tenerte,

y amarte,

y besarte,

y acariciarte,

y hacerte el amor,

mil veces,

mil veces amarte,

mil veces arroparte,

mil veces morderte,

mil veces comerte...

Y verbarte hoy,

porque mañana

ya será tarde.

M.

Alma y éxtasis

Y nos fundiremos en el éxtasis...
jubilosos y a puerto seguro,
del necio lenguaje humano, tú y yo.

Por: Yalaluddin Rumi.

Y reflexiono lo siguiente:

Y ...como consecuencia de un acto previo, nos fundiremos.

He ahí la consecuencia, dos seres que se funden, y se forman...ambos/as...se forman, hasta lograr ser sólo UNO. Pero es tan lindo saber que se funden en el éxtasis...

¡Que se funden en el éxtasis...!

Aquí puedo estar pensándolo un buen rato... ¿qué es el éxtasis?

Wao, para empezar es el estado del alma... así las cosas, es EN el alma en donde se aviva, y fluye el éxtasis, alma enteramente embargada, y si embargada entonces poseída, adueñada por el éxtasis, por un sentimiento de admiración o alegría...caracterizado por cierta unión mística mediante la contemplación y el amor...

Y nos fundiremos

en el éxtasis...

jubilosos. ... mediante la contemplación y el amor...

y a puerto seguro del necio lenguaje humano...tú y yo.

Y digo Yo, que son dichoso los ciegos como Andrea B., que contempla a nivel del alma y el espíritu el sentimiento puro del amor. Que por ser ciego no ve lo que palpa, sólo lo siente, y lo vive a nivel del alma, sin la contaminación de lo que puedan ver unos ojos prejuiciados...quizás ése sea el necio lenguaje humano...los prejuicios.

Me encanta...

Amar con los ojos cerrados, y darle rienda a un alma libre, para que ame...puramente...a un ser que se siente.

Entonces la pregunta de rigor es...¿cómo fundirme en el éxtasis, a nivel de alma?

Algo, o alguien me hace pensar, que se puede, porque el éxtasis es fruto de la contemplación y admiración, que germina en Amor...

Un beso en éxtasis,

M.

Vestidos

Entre mis lecturas, encontré una de mis anotaciones,
son más bien mis verdades personales, y ésta es una de ellas.

¨Son nuestros vestidos un arte,
un diseño, que viste nuestra verdad
intrínseca.¨

M.

Y sobre éstas líneas quiero re dibujar.

Si en realidad nacemos desnudos, entonces ¿porqué nos visten?

Si la vida y la naturaleza ya nos arropó y nos vistió con ésta tela,

nuestra piel..., entonces porqué la cubrimos, o la escondemos, detrás

de un vestido extra-corporal.

Si es nuestro cuerpo un arte,

porqué lo vestimos con nombres

de otros diseñadores...¿porqué?

Si ya nuestra piel guarda y arropa ...

nuestro tesoro oculto,

el alma...el alma somos nosotros mismos.

El alma, nuestra verdad intrínseca...nuestros pensamientos e intenciones, el corazón...

...aunque bien sabemos que los cuerpos,

no necesariamente reflejan el alma.

Entonces...¿para qué seguimos arropando el alma?

Arropándola de diseños y vestidos que no reflejan

en verdad...quienes somos.

Somos entonces algo oculto, escondido,

arropado, abrigado con tantos nombres

de modistos/as... que cuando nos miran

y nos llaman, o nos eligen... en realidad

están mirando el arte de otras almas,

sobre nuestra alma...ni tan siquiera están

mirando nuestro cuerpo...que tampoco es

reflejo nato de nuestra alma.

Asi las cosas, sigo pensando que son nuestros

vestidos un arte, un diseño que viste nuestra

verdad intrínseca...nuestra alma.

M.

La virtud del respeto y el silencio

Con el respeto y el diálogo, mantenemos la Calificación.
Y si no sabemos o no tenemos la capacidad de dialogar,
entonces...Silencio.

En Derecho a dicha ¨calificación¨, se le podría aplicar
el ¨Standing¨.

M.

Aprendí

Pies y tras pies,

chocando con heridas.

Sorprendida de lo cruel y

mala que puede ser la vida.

Paso y tras pasos,

que te choca y te golpea,

riéndose de tu vida.

Refugios buscados,

refugios encontrados,

en donde descansar,

regazos, en donde confiar.

Amores llegan y otros se van,

brazos que te calientan,

pero que también te entierran el puñal.

Refugios, refugiantes,

y embriagantes.

Hambrientos de carnes débiles,

y de sangre.

Dar vueltas, en medio de confusiones,

dar vueltas y no querer salir de las aflicciones.

Hasta el día que escuchas una voz,

reconocida que te llama,

y te abre la puerta para volver.

Mas bien para salir del refugio,

salir y volver al lugar de ti.

Volver a aquel lugar de donde salí,

volver hacia el objetivo para el cual nací.

Ya es el tiempo, se oyen las campanas,

que te llaman...

¡ Ya es el tiempo, vuelve al redil !

Dejar a un lado los poetas,

y volver para escribir,

escribir para aquello,

para lo cual nací.

Volver a aquel aroma sombrío y dudoso,

volver a aquel lugar, con las herramientas

que he aprendido y ganado,

en la batalla del refugio.

No podré dejar a un lado a los poetas,

poetas con quienes aprendí,

aprendí a escribir con rima,

con lira y canciones,

dedicadas al buen vivir.

No podré dejar a mis amigos poetas,

con quienes he aprendido

a escribir lo que siento,

cuando de ellos bebí.

Vuelvo a mi lugar, ¿cómo no?

pero vuelvo acompañada

de éstos mis amigos, los poetas,

que me enseñan a escribir.

M.

¿Quién nos sacia?

Insaciables.

Dicha insaciabilidad es la que nos mantiene existiendo.

Como que fuimos creados para ésa búsqueda hacia la saciedad.
Pero,
a lo largo del camino como que nos convencemos
de que es Nada y Nadie, quien nos sacia.

Que hay que pararse en la brecha, reírse del camino,
y saber que Nada y Nadie nos sacia.

Así las cosas disfrutamos el momento,
el momento de ver nacer un niño,
el momento de ver nacer un gorrión,
el momento de escuchar trinar a unos pajarillos,
el momento de ver nacer el Sol.

Ser saciados por unos momentos,
y guardar dicha saciedad en el recuerdo.

Usar nuestra imaginación
para re-recrear aquel momento,
que nos bañó de tanta ilusión.

Así las cosas disfrutamos el momento que nos regala la vida,
en un beso, en un abrazo, en un gesto
amable y lleno de caricias,
un gesto, un abrazo,
una brisa, una sonrisa.

Valga nuestro poder de guardar,
guardar esos momentos en el corazón,
para sacarlos, y re-crearlos
en nuestra fuente de inspiración.

Para sacarlos y re-crearlos,
desde nuestra fuente
de inspiración.

Un beso...

M.

Parte II de: ¨El dios que baila¨, de Massimo Cacciari

He sacado unas porciones del libro de Cacciari, aquí las presento y reflexiono sobre ellas,
diria que es una fusión entre Cacciari y Yo.

Los poetas.

¨Los poetas son transportados y poseídos como las bacantes...¨, pués he leído poesías, y poesías, y las más deleitosas las he leído de personas poseídas por el amor, o por la pasión, pero ciertamente poseídas. Arropadas por un espíritu o por una fuerza que les domina los sentidos. Que los atrapa y los inspira.

Dice Cacciari:
¨El hecho de estar inspirado por el dios, o de ser intermediario del dios. Canta bajo el efecto de un poder divino.¨

Y digo Yo, que la mayoría de las inspiraciones llegan cuando dicha fuerza quiere y se apodera del poeta, quizás, dicha fuerza busca corazones hábiles o dispuestos a ser usados por El Amor, La Pasión, La Lujuria, u otros temas muy bien expresados en los poemas...pero cierto es...que el poeta tiene que ser ligero, liviano y dispuesto para dejarse inspirar por alguna musa o muso.

Asi las cosas dichos musos/as son diosas y dioses que imperan sobre el poeta.
¨Su palabra es la expresión de ese poder, es una invención de las musas¨.

El poeta es como la cuenca de un río, que deja correr toda el agua que le viene y le arrastra.

Es entonces una fusión entre los sentimientos y el alma del poeta, y ése ser espíritual que invade las razones y los sentidos del poeta, ¨y lo usa¨, como marioneta, para aflorar y plasmar a través de la pluma del poeta, lo que el espíritu quiere decir... fluir.

¿Quizás sea el poeta un zombie?, es un instrumento si está presto y disponible, más bien deseoso de ser usado por las musas y musos, que están hambrientos de un ser para plasmar sus torrentes de filosofia, poesia e inspiraciones.

¿habrá alguien dispuesto y disponible?

¿Habrá alguien dispuesto a ser usado por alguna musa o muso?

Digo Yo que los poetas y los musos se fusionan en deseos y sentidos, es entre dos o más seres donde fluyen estos dialectos y fluidos poéticos.

¨El canto mas bello siempre es dictado¨, según Cacciari.
Y añade que si no es dictado por un dios, no será más que una obra de moderación,
una ornamentación, un juego.

Entonces la pregunta de rigor seria:

¿quién impera, quién delibera, quién decide la palabra, la rima, la pauta,
decide la musa o el instrumento llamado poeta?

Es una fusión digo Yo, es una unidad de espíritus, de pureza e intenciones, es un corazón deseoso de plasmar y dibujar junto a un espíritu PERFECTO Y ARMÓNICO que dirige las pisadas del poeta.

M.

P.D. En la imagen, el muso está colgado en la pared, el poeta simplemente lo mira y se inspira.

M.

¨El dios que baila¨ de Massimo Cacciari

Me acabo de comprar un libro de un autor desconocido (para mi).
Massimo Cacciari, pero yá realicé el ejercicio de saber quien es,
es filósofo distinguido y político activo.

Al comprar el libro me atrajo más su título que el autor, (algo raro en mi),
pués por lo general busco autores que tengan algo serio que decir.

Cuando ví el titulo; ¨El dios que baila¨, lo agarré, y lo compré.

¿qué tiene que decir Massimo al respecto?, ya lo sabré...
pero antes, quiero exponerme mis conceptos mentales sobre
El Dios que baila.

Si ya se fijaron, el dios de Massimo es con d minúscula, y el Dios Mio, con D mayúscula,
Ya el acento y la distinción está pautada.

Yo tengo unos conceptos, que los presto y los dispongo (en algo), para que se encuentren, se fusionen o choquen (quizás) con Massimino.

Antes de empezar, que tal si le dedico unas letras desde aquí, a Mi Dios,
a ése Dios, que me imagino que Si Baila...sólo lo imagino con mi mente finita.

Padre, Padre Mio,
Yo sé que tu bailas,
bailas al son de tu tanguito.

Tu bailas Padre Amado,
Bailas con ritmo en tu Santuario.

Dicen que tus faldas llenan el templo,
y que los ángeles dicen Santo, Santo, Santo.

Padre tu Bailas,
bailas al son de tu tanguito,
bailas con hermosura y devoción,
cuando algunos de tus hijos te invocan.

Bailas y te regocijas,
cuando ves que tus hijos,
se reconcilian.

Te levantas, te pones de Pie,
te acomodas tu corona,
y te pones tu cinto,
empieza tu música,
al son de tu tanguito,
y todos te admiramos,
te vemos y nos deleitamos.

Padre cada dia más,
Te Amo !
y ya veo como mueves tus caderas,
al son de tu tanguito...

M.

Jarabe de Palo y La Mari

Desheredación

Soy asesora de una revista y a veces redactora.

Me pidieron que redactara algo jurídico para la revista de diciembre,
y propuse unos cuantos temas,...los encontraron aburridos.

Me dijeron que no vendía, que ése tema no atraía el interés del lector.

Así que propuse el tema de la desheredación y relaciones paterno-filial.

Ese tema lo aceptaron porque no sabían que se puede desheredar a los hijos/as.

Acá no desarrollaré el tema jurídico, sino que seguiré tocando el tema de relaciones
entre personas, entre padres e hijos.

Dice el Código Civil, que ante una restauración y perdón evidente entre las partes, (el testamento en donde se plasmó la desheredación), dicha desheredación queda sin efecto.

La verdad es que Yo como madre no puedo concebir la desheredación de un hijo/ja,
independientemente de la causa legal.

Pués dicen que un hijo no pide nacer (tengo mis teorias adversas).

Los adultos y capacitados traen hijos e hijas, y un hijo e hija independientemente de su conducta seguirá llevando la sangre y la continuidad.

La ley provee para la desheredación, y la gracia y el perdón para la reconciliación,
y el Código reconoce que ante dicho perdón toda desheredación queda sin efecto.

¿A quién le gustaría que lo deshereden?

Creo que a nadie, es un dolor inmenso,
y lo que engendraría seria
mas dolor y rencor.

Asi las cosas la desheredación no es un medio de solucionar las conductas de los hijos,
y si un medio vengativo, y castigador para el hijo.

Nada mi gente son elucubraciones mias...me quedé pensando en la desheredación y en la batalla diaria que todos tenemos.

Un saludo,

M.

Aquí toy

Como no me fluyen canciones ni poemas,
pues musa ya no tengo,
estoy aquí...aqui toy.

En éste espacio, pues El Verbo...
es tan bello, no porque sea mio,
sino porque es tan divino, tan suave
y exquisito...
que no quiero manchar aquel espacio,
con mis vacíos existenciales, para eso,
éste nuevo espacio, para reflexionar
de mi...vacío existencial.

El Verbo...
ya no tiene musa,
ni inspiración, por eso lo dejé tranquilo.

Acá soy más de base,
nada divina, y no necesariamente
sabia, sino Yo.

Yo cantando como las veo,
Yo verbando como lo siento,
mas bien un desahogo.

En donde estoy, no tengo diccionarios cercas, así que perdonen mi escritura...

Y quiero tocar el tema de las relaciones. Todos-as, tenemos que forzosamente relacionarnos.
Y llegar a un estado de madurez en donde las relaciones sean maduras y prósperas.

Y me hago una introspección, (¿así se escribe?),
bueno, quiero decir una evaluación interna.

Las relaciones sanas, son aquellas en donde se aprende, se instruye, se anima, se edifica, se da libertad al prójimo, para que pueda ser quien quiera ser...

Las relaciones sanas, no cohiben (¿así se escribe?), no marchitan, ni arrastran, no coaccionan, no son caprichosas...

Me evalúo...

¿Cómo son mis relaciones?, ¿son sanas, edifican, levantan, construyen, alimentan?

O ¿son relaciones que obstruyen y derrumban?

Buenas preguntas, y me las hago de vez en cuando.

Sólo para analizar...

Esto ha sido una pequeña elucubración de martes en la tarde.

(Aplauso please !!!)

M.

Le robé una sonrisa

Robando risas,
me encanta robar risas,
me siento realizada cuando
le arranco una sonrisa a alguien,
y cuanto más a un niño/ña.

Domingo.

Cómo de costumbre, cada domingo en el templo,
junto a mi marido y mis hijos, digamos que es
un pacto de recién casados, el ir al templo,
con nuestros hijos, para buscar de Dios.

Pues creémos, que es la mejor herencia,
costumbre y práctica, que le podemos dejar
a nuestros hijos.

Frente a mi se sentó un niño de aprox. 5 años.

Yo le miraba en silencio, y el me exploraba
el rostro, mi manera de ser y estar en aquella
silla.

Le sonreía, y el niño se escondía...
volvia y salia, ...
Yo le sonreía, y el volvía y se escondía en su silla,
pero no me regalaba la sonrisa que quería de él...

A la tercera cuando salió de su escondedero,
(pues entre nosotros ya había cierto juego),
le quité los espejuelos que llevaba puestos,
y me los puse...Oh Dios !!!

Y el niño empezó a reírse,
y Yo a sacarle la lengua,
Ya sé, me imaginé que mis ojos,
parecían de búho en frío...

jajajajaja, mi marido que estaba a mi lado,
también se rió de mis ridículos,
pero Yo alegre, de poderle haber robado
una sonrisa a aquel niño.

M.

Cántaro

Ya mi cántaro tiene vino,

y si cántaro,

canta divino,

rebosante gracias al buen vino.



M.

La Mazmorra

Estaba en la mazmorra, no sé como llegué a aquel lugar, sólo sé que cuando abrí mis ojos, mi cuerpo hedía, apestaba, ni Yo misma me soporté tal peste.

Traté de recordar, recordar ¿cómo llegué a aquel lugar?, y la verdad es que no recuerdo.

Era un pozo viejo, húmedo, agrietado, astillado...

Y Yo... en el fondo de aquella mazmorra.

Me salían las lágrimas involuntariamente, como si lo que me quedase de alma y espiritu, llorase.

Miré al piso, era de día, miré excremento viejo, y sin quererlo tenia que respirar aquel olor a orín y excremento.

Me miré a mi misma, sucia, seca, con las uñas negras y largas...

me miraba el resto del cuerpo sucio y aturdido,

la ropa que llevaba ya algo andrajosa...

Y me preguntaba, ¿cómo llegué a aquella mazmorra?

Grité, gritaba, pedía auxilio...y aquel eco me retumbaba en los oídos.

Lloré, lloraba, y en mi sequedad ya ni salían aguas de delirio.

Turbada, sola, en medio de la peste y la mortandad que me asediaba, pués me sentía raquítica, flaca, en mis huesos de sal.

Una voz me decía, "Polvo eres, y al polvo volverás..."

Me cansé de llorar, me cansé de pedir auxilio, y sentir que nadie me oía, ni se acercaba,

sólo me acompañaban los gusanos que eran mas diestros que Yo en subir aquellas paredes, y dichosos eran en poder salir cuando quisiesen.

Me senté, ya se acercaba la tarde, y miraba hacia arriba, hacia el único hueco y orificio, que amablemente me brindaba la mazmorra, sin cobrarme nada.

Por lo menos, me decía Yo, puedo mirar hacia arriba, y ver lo único que podía ver, el cielo, las nubes, uno que otro pájaro...

Se iba la tarde, y llegaba la noche, se iba la esperanza de salir de aquel calabozo, y llegaba la penumbra, la noche, la oscuridad, el miedo, lo oscuro, quizás...la muerte.

Empezaba el frío, y las ganas pocas de orinar, pués ya seca estaba. Que desastre.

De repente, escucho un ruido, alguien me visita, llegada silenciosa, pero la siento, la veo, se me paran los pelos, me da miedo, empiezo a temblar y a verlo todo doble y triple, empiezo a sudar, las manos me tiemblan, y no me puedo sostenerme en mis piernas, quedo tiesa ante su presencia, me quedo tiesa ante su presencia, y ella en su zigzagueo, empieza a mirarme, a visitarme, a olerme, a saborearme, y yo quieta, tiesa, ya casi muerta... ante su presencia.

Creo que la última lágrima que me quedaba, brotaba de un ojo...

Y miré al cielo, he imploraba auxilio en medio de aquel éxtasis, miraba las estrellas, y les pedía socorro, y misericordia, mi boca seca, mi lengua marchita, y mi cuerpo moribundo asediado por una culebra.

... no sé como ocurrió...

...pero llegué a una canoa sólida, estaba sentada y abrigada, miré hacia el frente, y ví a un ser encapuchado, que cantaba...cantaba dulcemente, con paz y tranquilidad, remaba suave y sin prisa, estaba parado al frente de la canoa, y remaba y cantaba, suave y sin prisa.

Miré a lo lejos y vi tierra, vegetación, tierras nuevas y extrañas, y me preguntaba,

¿Cómo salí de la mazmorra? o mas bien, ¿quién me sacó de la mazmorra?, porque Yo reconozco, que por mis propias fuerzas, Yo sóla no salí.

Alguien me visitó, alguien me compró, alguien me cargó, y me montó en su hombro o en sus brazos, y me montó en aquella canoa, que se constituyó en mi salvación...

Alguien me abrigó, y le ordenó a aquel encapuchado con cara de luz, que me llevara a aquella tierra, a aquel lugar, a aquel horizonte, quizás aquel encapuchado fué un ángel de luz, y quizás fué el mismo quien me sacó de la mazmorra.

No sé, que era mejor, haber muerto en los brazos de aquella culebra,

o empezar de nuevo, a vivir o existir en tierras extrañas.

Creo que lo mejor era o es seguir en aquella canoa de salvación, guiada eternamente por aquel encapuchado de luz... que me brindaba paz y tranquilidad, cánticos, y me dió o me permitió abrigo.

Sólo sé una cosa...que salí de la mazmorra.

M.

Hola !

Bienvenidos y bienvenidas,
a mi nueva casa,
a Mugget.

M.