¡Feliz!
Sigo feliz, y mi felicidad
consta en lo que creo,
y creo que soy feliz,
me siento feliz,
y lo hago cuando respiro,
cuando leo y cuando escribo.
No dependen tanto de las circunstancias,
sino de la esencia de las cosas en ellas mismas.
Y cuando digo cosas,
son aquellas infalibles,
intocables, inmutables e invisibles,
asi como el amor y la paz.
M.
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11 comentarios:
Permítame que la acompañe en su felicidad, que juntos es más llevadera ;)
Cuán unidos nos sentimos los peregrinos del camino.
Un saludo recibe y un abrazo, desde este pirineo que habito...
La felicidad es efímera, pero cierto es que hay momentos que no son explicables, sólo nuestro ser entero es capaz de saborear con todos los sentidos momentos tan llenos que parece que estallaremos.
Sigue llenándote de todas las cosas bellas.
Un fuerte abrazo.
Los momentos de felicidad se esculpen en nuestra piel, en nuestro corazón y en nuestra alma, y son estos los que nos ayudan a seguir creyendo en la vida, la humanidad y todo lo creado.
Sigue llenándote de cosas bellas.
Un fuerte abrazo.
Después de leerte solo me queda desear que continué esa felicidad y que no encuentres ningún instante que nuble esa sensación.
Un abrazo.
Hola M, entro rapidito pero hago un check a tu blog para verlo con mas calma luego, pero te digo ahora que me encanto este poema.
No hay nada mas cierto, para ser feliz no dependen tanta las circunstancias sino de la esencia... (yo diria aqui de las personas, pero es tan personal)
Muchos Besos, gracias por la visita y nos seguimos leyendo.
que bueno que ya seamos dos los que estamos felices...
ojala la felicidad nos dure mucho y que nunca pretenda salir de nuestro corazones... se siente rico el ser feliz no?
un saludo desde Cali(COLOMBIA)
Pos si tu eres feliz yo lo soy también!!!
que si!
te adoro amiga mia!
Amiga, tanta felicidad es contagiosa, bienvenida sea!!!
Un abrazo!
Gracias por la huella.
Me encanta leer a la gente feliz, ójala nunca pierdas la alegría.
Un abrazo.
Para mi la felicidad depende de los demás pues personalmente no pienso si estoy triste o feliz, sólo pienso en lo que debo ser o hacer para agradar a Dios, aveces me quejo, critico, me burlo, pero sin mala intención, es porque estoy en el lucar indicado a la hora precisa, como tu dices: Creer en lo infalible.
Besos desde los andes.
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